Cada 28 días es una película documental intensamente personal, en la que la directora Ina Borrmann, documenta sin descanso su deseo de tener un hijo.
“Me acompaño a mí misma y a mi pareja con la cámara durante un largo periodo de tiempo en nuestros intentos por quedarnos embarazados y nos entrevisto. Documento mi dolor por una pérdida aparente, que antes nunca había sentido así. Es un documental en primera persona, una especie de película-diario autobiográfica en la que la cámara me sirve de espejo, de confrontación ordenadora con mi propia realidad.”
La autoobservación y el autocuestionamiento dieron como resultado una película documental, sobre algo que experimentan muchas mujeres: el deseo de tener un hijo, pospuesto hasta finales de los 30 años por diversas razones, que amenaza con quedar insatisfecho.
Cada 28 días es una película documental intensamente personal, en la que la directora Ina Borrmann, documenta sin descanso su deseo de tener un hijo.
“Me acompaño a mí misma y a mi pareja con la cámara durante un largo periodo de tiempo en nuestros intentos por quedarnos embarazados y nos entrevisto. Documento mi dolor por una pérdida aparente, que antes nunca había sentido así. Es un documental en primera persona, una especie de película-diario autobiográfica en la que la cámara me sirve de espejo, de confrontación ordenadora con mi propia realidad.”
La autoobservación y el autocuestionamiento dieron como resultado una película documental, sobre algo que experimentan muchas mujeres: el deseo de tener un hijo, pospuesto hasta finales de los 30 años por diversas razones, que amenaza con quedar insatisfecho.